Desde niño he sido alguien inquieto e inconformista por las cosas que me gustaban. Nunca he sabido que significaba el “no”, aunque lo haya probado muchas veces, y no por la inconsciencia que ello significa, sino por la ambición que recorría mi cuerpo y mi mente.

Puedo decir que estoy orgulloso de la persona que soy hoy, que seré mañana y que fui ayer, porque reconocer tu pasado y esperar los frutos de tu futuro, es lo que me ha hecho ser quien soy ahora.

Como me gusta decir y pensar.

Aunque las cosas pasen por algo y el destino nos tenga escrito a dónde debemos llegar, no nos dice por dónde debemos ir, y mucho menos como, pero una cosa si es segura, sin hacer nada seguro que jamás llegaré, así que manos a la obra y a sacar la mejor versión de mí mismo, está decidido, nada puede pararme.

Una secuela bastante resumida, queda mucha historia por contar. ¡Te veo más adelante!